Según la tradición, el muérdago se debe regalar y colgarlo en casa cerca de la puerta de entrada para que toda la familia tenga salud y buena suerte.
Al año siguiente hay que quemarlo y debe ser sustituido por otro nuevo. Dice también la tradición que la pareja que se diera un beso bajo una rama de muérdago tendrá felicidad asegurada toda la vida.
¡Buena Suerte!